La idea de "pintar" no siempre coincide con la de "crear".
La ejecución del riesgo en una obra es el debate interno, intelectual del artista, unido a la experimentación de técnicas, modos de expresión, soportes a utilizar y demás condiciones o cualesquiera variables de la creación artística y todo ello unido a la posibilidad de dejar la puerta abierta al hecho de poder hacer cambios (racionales o irracionales) sobre la obra en ejecución, incluso de la propia inactividad en un momento determinado. La realización física de la obra no es más que el juego de aquellas variables.
La ejecución material de la obra viene siendo el escalón más liviano en la elaboración, puesto que se tarda más en pensar sus diferentes elementos, siguiendo cada cual su propia rutina intelectual o reflexiva y elaborando una proyección mental que luego será seguida o no por la ejecución plástica.
